Bienestar

Lo que no querría saber del embarazo

GABRIEL SANZ

La maternidad no es tan maravillosa como la pintan: hemorroides, infecciones, gingivitis y estreñimiento, entre otros males, son los acompañantes habituales en esta etapa

Para muchas mujeres, la belleza de la maternidad es un mito. "Nos lo pintan todo de color de rosa para preservar la humanidad", cuenta con mucho humor Cristina Quiles, ilustradora y autora del libro La madre que nos parió. Es una experiencia única, no hay duda, pero pocas hablan de las pequeñas (o no tan pequeñas) molestias que acompañan al embarazo, esas que nadie nos había contado antes y que nos encontramos de forma inesperada.

Sofía Fournier es madre de dos hijos, ginecóloga en el Hospital Universitario Quirón Dexeus de Barcelona y una de las autoras del libro Las 100 preguntas del embarazo, de Avène, donde "las mamás pueden aclarar muchas de sus dudas sin necesidad de recurrir al doctor Google", cuenta. El libro puede descargarse gratuitamente en la página preguntas del embarazo.

Cuando se quedó en estado de su segundo hijo, la doctora Liuba Canal decidió combinar su trabajo en la consulta de ginecología de una clínica de Las Palmas con un blog en el que iba explicando, semana a semana, todo lo que le ocurría a su cuerpo "con el fin de ayudar a aquellas mujeres que están pasando por lo mismo".

Entre las tres expertas y experimentadas madres han realizado para ZEN un decálogo de 14 problemas que las mujeres pueden encontrarse durante su periodo de gestación. Algunos de ellos son conocidos y habituales, como las náuseas matutinas, la aversión a determinados olores o comidas, las estrías y los constantes cambios de humor (échenle la culpa a las hormonas), pero otros nos visitan de imprevisto: infecciones vaginales, hemorroides en la recta final y encías sangrantes.

Los anuncios y las redes sociales sólo muestran madres que parecen inmunes a los estragos de esta intensa etapa, pero la realidad es muy diferente: "Tenemos un parásito que nos chupa la energía, unas hormonas que nos anulan la cordura, síntomas que bien servirían como método de tortura, y unas redes sociales que nos dicen que a las demás no les pasa...", asegura Quiles. Pero sí les sucede, aunque muchas no se atrevan a contarlo en voz alta. Y mientras, las demás madres imperfectas nos preguntamos por qué nadie nos había dicho nada sobre que "nos íbamos a pasar sangrando 30 días seguidos con una compresa-pañal puesta", asegura Cristina Quiles. Puede que "nos merezcamos una plaza en el infierno del postureo social. ¡Allí os espero, queridas!", continúa. Éstas son las 10 cosas que nunca querría saber sobre el embarazo.

14 Problemas que puede encontrarse durante su periodo de gestación

  1. AUMENTO DE PESO: La báscula nos revela la fatídica realidad: nuestro tamaño aumenta por momentos. "No sabía qué ponerme. Me sentía como una mesa camilla, sin tener en cuenta que al final ya ni llegaba con el cortaúñas a los pies. Me veía de todo menos bonita y sensual", cuenta Quiles. La farmacéutica Inma Riu recomienda llevar colores oscuros, rayas verticales y evitar la ropa ceñida.
  2. ESTADO ANÍMICO: Los cambios de humor son comunes y difíciles de sobrellevar, principalmente para aquellos que nos rodean, No se preocupe, tiene justificación: las hormonas. "En el primer trimestre aumenta la progesterona. A lo largo del segundo trimestre la sintomatología suele mejorar, pero hacia el final puede volver a ocurrir", explica Fournier.
  3. GINGIVITIS: Es frecuente que las encías se inflamen y sangren al cepillarse los dientes (gingivitis), así como la nariz (epistaxis). "Esto ocurre porque las mucosas están hipervascularizadas durante el embarazo. No es un problema grave, pero hay que extremar la higiene bucodental y es aconsejable acudir al dentista como mínimo una vez durante la gestación", asegura Fournier.
  4. MOLESTIAS Y DOLORES: "Conforme aumenta el volumen del abdomen, la curvatura normal de la columna se acentúa. Esto puede llegar a resultar molesto. La práctica de alguna actividad como la natación puede ayudar", cuenta Fournier. Otra molestia común son las palpitaciones y taquicardias: "El corazón ha de bombear sangre a más territorios (placenta, útero...) y para ello va más rápido", continúa.
  5. ESTRÍAS Y CELULITIS: Todas intentamos evitarlas desde el primer momento untándonos en aceite de almendras, pero hay ocasiones que ni con esas... "Depende mucho de la calidad de nuestra piel", cuenta Canal. Además, el aumento de los estrógenos y la consiguiente retención de líquidos y menor eficiencia del sistema circulatorio, están detrás de la temida celulitis.
  6. POSPARTO: Y llega la temida episiotomía: ese pequeño corte que facilita la llegada al mundo de nuestro pequeño y que nos imposibilita sentarnos como una persona normal durante días. "Todo el mundo te envidia porque dejas de tener el periodo, pero se callan que luego vas a estar sangrando 30 días con una compresa-pañal puesta", cuenta Quiles. Y eso sin contar con los esfínteres sueltos del parto...
  7. HEMORROIDES: "En este periodo las varices en las extremidades inferiores y en la zona pélvica aumentan por la dificultad del retorno venoso que supone la presión que el útero está ejerciendo en la pelvis. Además, la retención de líquidos y el estreñimiento (el hierro y las vitaminas ralentizan el tránsito intestinal) pueden aumentar esta sintomatología", explica Fournier.
  8. MANCHAS Y ACNÉ: "Durante el embarazo aumenta la formación de sebo, lo que puede provocar acné en algunas personas", cuenta la farmacéutica Gema Herrerías. También es común la aparición de manchas (cloasma) en la cara debido a una mayor estimulación en la producción de melanina, por lo "que es aconsejable aplicar un protector solar del 50+".
  9. CANSANCIO E INSOMNIO: Según la Sociedad Española del Sueño, el 70% de las gestantes padece algún trastorno del sueño. "Durante el primer trimestre, el aumento de la progesterona, entre otros factores, hace que la gestante se sienta más cansada ", explica la farmacéutica Inma Riu. Esto empeora en la recta final debido al tamaño de la barriga, así como a las constantes ganas de ir al baño.
  10. INFECCIONES: "Otra situación incómoda que muchas no saben y a casi todas les sucede es la infección vaginal por hongos (candida albicans), la más frecuente de todas, que produce picores insoportables. Lo positivo es que con tratamiento, se soluciona", explica Canal. El aumento en los niveles de estrógenos está detrás de este molesto problema.
  11. SEXO: "Está demostrado que durante el embarazo el sexo disminuye aproximadamente en un 50%", explica Fournier. Esto se debe al cansancio, al miedo al aborto, a tener infecciones o a dañar al feto, o incluso por molestias vaginales en la penetración, pero la doctora Canal explica que "se pueden tener relaciones sexuales hasta el último día si todo está bien".
  12. MALOS OLORES: "Sobre todo en las primeras semanas, se agudiza el sentido del olfato, lo que significa que cualquier olor te puede llegar a molestar, por no hablar de las comidas que te producen náuseas", cuenta Canal. "El motivo vuelven a ser las hormonas, que hacen que aumente la vascularización de la mucosa nasal", puntualiza la doctora Fournier.
  13. PICORES: "El picor o prurito es un síntoma frecuente durante la gestación, debido a la sequedad o tirantez producida por el estiramiento de la piel. Se recomienda la aplicación de antipruriginosos tópicos como la loción de calamina o baños refrescantes con avena, mantener la piel hidratada, beber agua y evitar duchas calientes", asegura Gema Herrerías.
  14. NÁUSEAS Y DIGESTIONES: Las náuseas son la principal queja de la mayoría de las embarazadas. Otra es la acidez. "Ésta se debe a tener unas digestiones más lentas. La responsable es la progesterona. En los últimos meses la acidez aumenta debido a que el estómago y el esófago se ven desplazados de su posición habitual por el mayor volumen del útero", cuenta Fournier.

25 Comentarios

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Creo que al embarazo se puede aplicar lo que nos contó nuestra fisio en preparación al parto sobre el dolor del parto: "Es el único dolor que vais a tener en vuestra vida que es por algo bueno". Y es así. ¿Eso te quita el dolor? No, pero es verdad que hace que lo enfoques todo de otro modo... Tuve náuseas hasta la semana 20, calambres, se me ponían unos tobillos del tamaño de mis gemelos, y al final del embarazo tenía una tripa enorme. A pesar de que probé como 7 tipos de cremas diferentes, me han quedado tantas estrías que ni las he contado. Las primeras semanas post-parto, con las hormonas de verbena y todas las emociones, verse el cuerpo así no ayuda... Pero las hormonas se recolocan, el cansancio pasa, y tener al lado a la persona que más te quiere en el mundo codo a codo contigo y viéndote preciosa hasta con la tripa hecha un código de barras, y a vuestro lado vuestro hijo... pues así una ve que vale la pena todo. Hablar de estos temas: sí. Ir de víctimas: no.

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Escriba aquí su comentario @gemma_lormar #13 Tal cual... Además, información sobre los efectos secundarios "no bonitos" del embarazo hay por todas partes... está internet, tus amigas que ya son madres y los cursillos de preparación al parto... Quien no está informado es porque no busca...

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Te dicen que todo es maravillosos, pero la realidad es muy diferente. Aún así hay mujeres que lo pasan mejor o peor. Una de las cosas que más me molestó, es el término médico de "primípara" como las vacas, vamos, y si tienes más de 35 además "primípara añosa". Además el cuerpo ya nunca vuelve a ser como antes del embarazo, salvo que seas una celebriti con mucho tiempo y pasta para entrenadores personales, dietistas ah, y que te cuiden al niño las 24 horas. Todo ello además, influye en tu autoestima y por supuesto en la relación con tu pareja, para peor.Ya nada vuelve a ser igual.A lo mejor tu madre te lo tenía que contar...

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@letheyn #11 Así es, la eterna mitificación del proceso del embarazo y de la figura de la madre. Hay mujeres a las que el embarazo les va muy bien y a otras penoso, y madres encantadas de serlo y otras que si pudieran volver atrás no tendrían hijos ni aunque les pagasen. Se pinta el embarazo como un proceso que ha de ser maravilloso porque sí y a la mujer que es madre y va pregonando las virtudes de la maternidad como un ser que roza lo divino. Pues no: hay embarazos desastrosos, hay mujeres que se arrepienten de haber tenido hijos y otras que deciden no tenerlos, y esas mujeres son tan normales y buenas personas como las del libro de lo socialmente correcto.

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Tuve a mi primer hijo y es verdad que los tres primeros meses por las mañanas lo pasaba fatal pero luego, aparte de esas molestias, el resto fue maravilloso. Se me puso la piel lisa y suave, el pelo también. En el postparto, en mi caso, nada de sangrar durante 30 días y dormía como una marmota !!. Mi hijo pesó 4,250gr....no digo más. No tuve ningún tipo de depresión, al contrario, estaba tan feliz con mi bebé que no podía creerme que fuese mío. Tuve el segundo sin ningún problema y tan feliz. Creo que depende mucho de la naturaleza de cada mujer