ESTADOS UNIDOS

El republicano trata de aglutinar el voto de la clase media blanca estadounidense

Donald Trump quiere un Brexit para EEUU

RICARDO

El 'USAexit' del magnate con el mundo: muro que separe EEUU de México y la exigencia a Europa de que gasten más en defensa si quieren OTAN

Las claves del éxito de Donald Trump

Si hace 12 años, cuando el Partido Republicano celebró su Convención en el Madison Square Garden de Nueva York, alguien le hubiera dicho a los aliados europeos de Washington que en 2016 iban a echar de menos aquella candidatura formada por George W. Bush y Dick Cheney, le habrían contestado que mejor se lo hacía mirar.

Ahora, tras la Convención Republicana de Cleveland, George W. Bush y Dick Cheney son vistos con nostalgia por gran parte de los aliados de este lado del Atlántico. Si antes el Viejo Continente se quejaba de que EEUU intervenía en todas partes, ahora se enfrenta a lo contrario. Con Trump como presidente, Washington quiere saber lo menos posible del resto del mundo. Y eso causa pánico en, precisamente, el resto del mundo. Ya lo dijo Henry Kissinger hace cuatro décadas, cuando hablo de lo que calificó como 'paranoia europea': si EEUU se pone 'duro', Europa teme una guerra; si se pone 'blando', teme que les abandone. Y ahora Donald Trump ha formulado claramente su política: el 'Brexit', en versión estadounidense. A falta de un término mejor, llamémosle 'USAexit'.

No es solo un 'Brexit' externo. También lo es interno. En su discurso de aceptación de la la nominación republicana, Trump vino a decir que sus votantes-sobre todo blancos de clase media y media-baja-también quedarán blindados de las minorías, en particular los hispanos y los negros. Casi tan llamativo como lo que Trump dijo es lo que calló. En esta Convención no ha habido ni una sola alusión al 'Estado pequeño' ('small Government') del que los republicanos llevan hablando desde 1980. Y el partido del libre comercio ha abrazado el proteccionismo. Después de eso, solo nos queda por ver a Mariano Rajoy defendiendo un referéndum en Cataluña.

A nivel mundial, este 'USAexit' es la desconexión del resto del mundo. Trump quiere un muro que separe EEUU de México; la renegociación de un tratado comercial que existe desde hace 22 años con sus dos mayores socios, y sus únicos vecinos-México y Canadá-; la exigencia a los europeos de que gasten más en defensa si quieren que la OTAN siga existiendo; y la declaración oficial de que China está manipulando su divisa para que sus exportaciones sean competitivas.

Las dos políticas aislacionistas y proteccionistas-del país en el exterior, de su comunidad de votantes en el terreno interno-se alimentan entre sí. Como explica en un email a este periódico Manuel Muñiz, director del Programa de Relaciones Trasatlanticas de la Universidad de Harvard, "estamos empezando a comprender que lo que produce esta radicalización de la vida política no es otra cosa que la erosión de la clase media, el estancamiento de los salarios y el aumento de la desigualdad. Lo que está en juego es el orden liberal construido desde la Segunda Guerra Mundial por nuestra incapacidad para construir sistemas económicos inclusivos". Las grandes siglas-OTAN, UE, OMC, FMI-están en el punto de mira de estos movimientos. Lo mismo que Wall Street o la City de Londres. Cuando el jueves la esposa del senador Ted Cruz tuvo que ser escoltada fuera de la Convención para evitar que fuera agredida cuando su esposo se negó a apoyar a Trump en la tribuna de oradores, la gente gritaba "Goldman Sachs, Goldman Sachs!", como si fuera un insulto. Goldman Sachs, el banco del que salió el ultimo secretario del Tesoro con George W. Bush, y el presidente del BCE, Mario Draghi, y en el que trabaja la mujer de Cruz.

'USAexit' no es solo ideológico. También es racial. En estas elecciones, la política estadounidense ha quedado fracturada a lo largo de líneas raciales: blancos de clase media con Trump; blancos muy pobres y muy ricos, hispanos, negros, y asiáticos con Hillary. Cada partido no sólo tiene su ideología; también tiene su raza.

La apuesta es arriesgada. Va contra los principios del Partido Republicano. Así lo deja ver el columnista conservador del New York Times y autor del best-seller 'BoBoS en el Paraíso' (Grijalbo) uno de los libros más apreciados por los conservadores de EEUU. "Esta Convención es decepcionante. Es como el vaciamiento total de un Partido Republicano que era internacionalista, creía en el libre comercio, creía en la inmigración, quería reducir drásticamente el tamaño del Estado", explicaba Brooks a EL MUNDO el viernes con un aire abatido acentuado por un rayonazo en sus gafas sin montura.

Esa oposición va más allá de las élites del partido. El veterano presentador de CNN Español Juan Carlos López, que ha cubierto 7 Convenciones, detectaba una más que visible falta de entusiasmo. "Parece que hay poca excitación por parte de los delegados. Creo que esta es la consecuencia de una campaña con tantos candidatos, una campaña muy diferente, en la que muchos que están aquí no tenían a Trump como candidato. Se atomizó el voto, y al final todavía se están uniendo", explica a este periódico.

Ahora bien, el discurso de cierre de la Convención de Trump pudo, posiblemente, restañar esas heridas. Su movimiento es transversal, porque entre la clase media blanca que le apoya hay desde sindicalistas que eran tradicionalmente la espina dorsal demócrata en estados decisivos como Ohio hasta pequeños empresarios que han sido el soporte de los republicanos.

De hecho, su apuesta es empresarial. Trump ve estos comicios como una decisión estratégica. El mercado electoral estadounidense está cambiando. Los blancos son menos, pero todavía son la mayoría, y ahí es donde los republicanos tienen mayor cuota de mercado. Por el contrario, los nuevos grupos-latinos, negros, y asiáticos-son de lealtades inciertas, cuando no declaradamente demócratas. Así que Trump ha optado por su 'legacy business', por lo seguro, como un banco que se refuerce en las sucursarles en detrimento de la banca 'online' o un medio de comunicación que renuncie a volcar ni un solo contenido en internet. Y, al mismo tiempo, quiere expandir su operación a sectores que ve propicios para su marca: los homosexuales, y la izquierda que se opone al libre comercio.

Pero Trump no tiene aliados. "Si gana, va a intentar que EEUU abandone Europa", aventura Brooks. Pero, a continuación, lanza un importante matiz: "Su campaña no tiene aparato de política exterior. No puede conseguir asesores, y nadie en el Pentágono quiere hacer nada con él". La cuestión es que, hasta ahora, Trump ha arrasado sin que nadie quiera hacer nada con él. Así que está por ver que ése sea un impedimento.

93 Comentarios

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@ivfrutos #92 yo imagino los paises africanos estara contento tambien, un ejercito debil en espana es perfecta cuando los quieren las canarias o ceuta y mellila..y un debil EU es muy perfecta por las arabes y russia y en fin llos muslames de turkey,,sin eeuu europa es muy abierto desde paises celosa

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A los simples no piden el voto y los simples ponemos y quitamos gobiernos , así que lo que piense un ¿diez tipejos en la barra de un bar tiene más fundamento que lo que piense un director de banco en su oficina . Fundamento y mucho más teniendo en cuenta que el listo del banco nos ha estafado .

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Muy buenas y bye bye. El gasto de la OTAN para cosas que de verdad importan. Se gastan miles de millones en armas super mega molonas, sistemas de escuchas y de seguimiento...bl bla bla, para que después los que atentan y matan se comunican de boca a boca o con post it. Las bases americanas de la península que las pongan en el mar. Habla como el malvado alemán aquel del bigotillo.

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@arceyroble #89 cómo que Trump no critica la entrada de inmigrantes ? Yo creo que realmente no has pensado lo que has dicho , si quiere levantar un muro con Mexico es para evitar la entrada de inmigrantes , lo mismo que está haciendo la UE con los refugiados y lo mismo que pretende UK con él brexit , nadie quiere un mayor número de inmigrantes ni refugiados en sus países y es algo que está ahí , te puede gustar más o menos , lo que no me parece coherente es que te parezca bien el futuro muro de EEUU y no te parezcan bien otros " muros" que esos sí que no son reales , se limitan a cerrar las fronteras que no es lo mismo , lo cual me parece mal , pero también con el respeto y miedo de que por ejemplo unos de los últimos atentados en Europa los haya hecho un refugiado , el miedo es libre y nadie quiere meter en sus casas a lobos disfrazados de corderos , lo cual no tiene nada que ver con evitar la entrada de inmigrantes para trabajar como pasa en USA o en UK

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@oscarcarrero5 #79 Si, se me olvidó el muro de Israel. A mí los muros me parecen una aberración en general, igual que a ti. El muro de Berlín lo conocí y lo pasé. Creo que en Belfast también había otro. A lo que me refiero es que si queremos criticar muros, hay que criticarlos TODOS, no solo el hipotetico de Trump, que ni siquiera está construido. ¿Quién critica que Europa no acoja a más inmigrantes? Aquí en EE.UU. nadie lo critica. Bueno, quizá George Cloony, que no ha acogido ni a uno solo en sus varios palacios y mansiones. Los países ricos del Golfo no han acogico a ni un refugiado, pero nadie los critica.

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nato es como el EU..la mayoria del paises quieren todos para gratis

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@apgs78 #83 No es cuestion de quien lo empezara, si no de que Obama lo continuo. Aqui por ejemplo Aznar hizo el boom de la burbuja inmobiliaria, copia americana, pero solo se comprometio el 0¿9 del PIB y se empezo a desinflar, llego Zp y la relanzo, usando las cajas de ahorro como financiación de la construccion y del credito hipotecario, se comprometio en ello el 5% del PIB con ZP en construccion. ¿la culpa fue de Aznar por emperzar y parar o de Zp por relanzarla e incrementarla en mas de 4 puntos del PIB?